Estos días se está hablando en la prensa sobre la muerte de Fritz Darges, quien fuera ayudante de Hitler durante un tiempo. La anécdota más conocida de este hombre fue precisamente su despido. Según se cuenta, en julio de 1944, unos días antes del atentado, Hitler se encontraba junto a Fritz Darges y una mosca entró en la habitación. Hitler ordenó a Darges que se deshiciera de ella. Entonces a éste no se le ocurrió otra cosa que decirle que eso era competencia del adjunto de la Luftwaffe, Nicolaus von Below, que se encontraba allí mismo. En ese momento Hitler se enfadó y le dijo que debería estar en el frente del este y le despidió.
Es una anécdota un tanto turbia. Porque ese humor es muy típico de Hitler y dudo mucho que se lo tomara tan mal como para despedir a su ayudante, a no ser que existiera otro importante motivo. Por otra parte Darges jamás ha hablado mal de Hitler y le ha sido leal hasta el fin de sus vidas. Así que dudo mucho que ese incidente fuera realmente así.
Al parecer, Darges ha dejado a la posteridad un libro que promete informaciones muy importantes. Claro que esto es típico de la prensa. Dudo mucho que sus declaraciones sean sorprendentes ni nuevas. Ya veremos cuando salgan a la luz.
Hoy me he comprado el libro del autor manga japonés Shigeru Mizuki. Sólo cuesta 12 euros. Lo primero que he hecho ha sido leer los créditos y he comprobado que se trata de un libro escrito en 1971. En ese caso, y no tratándose de un historiador, es lógico que haya que cogerlo con muchas reservas. Muchas. Sobre todo, leyendo la bibliografía que utilizó el autor. En ella aparecen nombres tan dudosos como Hermann Rauschning, quien se dedicó durante años a difamar a Hitler con mentiras, William L. Shirer o Werner Maser. También aparecen nombres japoneses que no conozco. El único historiador "serio" que el autor utilizó fue Alan Bullock, historiador que ya ha quedado un poco desfasado. Pero bueno, entiendo que no se trata de un libro para profundizar sobre Hitler. Se trata de su vida ilustrada. Y en ese sentido resulta gracioso ver a un joven Hitler y las ilustraciones resultan atractivas. Pero nada más. Sin duda se trata de una forma de acercar a Hitler a personas que apenas leen libros y les gusta más el mundo del cómic. El libro, como todos los manga, hay que leerlo al revés.