En un momento de descuido Hitler se mira las uñas y cuando se da cuenta de que le están fotografiando, le entra la risa. Sin duda, ese día estaba de buen humor.
Como dijo Von Loringhoven en sus memorias: "Cuando Hitler quería, podía ser muy amable. En ocasiones hablaba con voz suave y en un tono cordial y afectuoso. (...) sus visitantes quedaban impresionados por su amabilidad".
También reía como cualquier humano :)
ResponderEliminarComo dijo Von Loringhoven en sus memorias: "Cuando Hitler quería, podía ser muy amable. En ocasiones hablaba con voz suave y en un tono cordial y afectuoso. (...) sus visitantes quedaban impresionados por su amabilidad".
Saludos! ;)
Nacho de antemano gracias por crear este rincón para los que admiramos y estudiamos juiciosamente la vida de Adolf Hitler.
ResponderEliminarSoy nuevo en esto, pero entre más leo y me documento, aumenta mi "apetito" por saber más sobre este humano y brillante militar.
Saludos desde Colombia